Por fin, después de 1 mes donde mi psicólogo ha puesto patas arriba mi vida buscando de dónde me viene la ansiedad, la semana pasada dió luz verde al nutricionista y hoy ya me ha dado la dieta y mañana comenzaré a perder peso.
Peso exactamente 103.800, me ha pesado por la tarde, vestida y hoy me he puesto con la regla, por lo tanto con retención de líquidos.
Tengo 40.5 de IMC, por lo tanto obesidad tipo 3 o mórbida, estoy en el límite, por lo tanto de la obesidad tipo 3 saldré pronto.
Si estoy contenta con el psicólogo, también estoy contenta con el nutricionista, ambos son entusiastas, ponen pasión en lo que hacen y quieren que las cosas salgan bien y eso se nota.
Mi nutricionista me ha dicho algo que me ha dado qué pensar y que explica porqué mi primera meta son 83 kilos, o sea perder 20 kilos si me sobran 35 o más.
La respuesta es que mi cuerpo piensa como uno de 100 kilos, si pierdo 20 (como hemos establecido) dejaré de perder o me costará mucho trabajo y si me distraigo me cuelo otra vez en 103 pero si llego a 83 y me mantengo durante 6 u 8 meses, mi cuerpo empezará a pensar como uno de 80 y entonces ahí podré dar otro empujoncito y quitarme lo 15 me que queden.
Me parece razonable y confio en que así sea.
De momento mañana empiezo la dieta, una dieta basada en la dieta mediterránea, bastante variada que me obligará a cocinar y a abrir el abanico de verduras que consentia hasta ahora.
La reeducación alimenticia consiste, entre otras cosas, en comer de todo.
Y de momento eso es todo, a partir de ahora sí escribiré a menudo indicando lo que he comido, lo que tenía qué comer (espero que siempre coincida) y como estoy (por cierto, hoy como una moto)
Besitos miles
